¡Qué delicia escuchar a tus amigos los cuervos! Es una pena que tú no sepas cantar como ellos.
Pero yo también puedo, aunque tal vez no ahora
El cuervo no podía evitar sentirse mejor. Disfrutaba muchísimo ser el centro de atención.
En fin.. Me da rabia que apesar de ser tan bonita no sepas deleitarnos con una hermosa melodía.
El cuervo no lo soporto más tiempo por lo que dejo caer su trozo de carne y empezó a graznar lo más fuerte que pudo.
¡Ay, cuervo! ¡Eres un presumido pero muy poco inteligente! Ser tan vanidoso sólo te traerá problemas. La próxima no hagas caso de los que como yo, te dicen lo que quieres oír-
jajaja
Le dedico un guiño y entre risitas se alejó, dejando al cuervo sonrojado
Cuando se dio cuenta de su metedura de pata, ya era demasiado tarde:el zorro se zampaba su comida y todos los cuervos se partían de risa. Satisfecho el zorro le dedico unas palabras burlonas pero ciertas.