Que feo este lugar, y estos murciélagos peludos que asco
Leyendo las cartas
La enferma y su resfriado
Gracias, Teresa te lo agradezco mucho. Tengo una calentura horrible
Hola aquí les traigo comida y esta medicina para Enriqueta
Elenita la pusieron a lado de la mesa de Enriqueta, y ella casi no ponía atención ya que el lugar estaba lleno de murciélagos y aquellos horrosos sonido de monos se escuchaban ella no le gustaba estar allí.
Expresión extraviada
Aquí te traigo unas píldoras azules
Enriqueta no volvió a comer guiso dudoso y rezaba todas las noches. Ella leía las cartas, libros y periódicos que Tío Ricardo le enviaba, mientras que Elena trabajaba en sus deberes. llevaron 2 meses de estar así soportando el tal género de vida.
Fincas Bananeras
¡Si, juguemos naípes y tomemos cerveza!
Pasaron los días y Enriqueta se enfermó le dio un gran Resfriado que hasta temblaba del frío, la señora del Alcalde la venía a chequear para ver como estaba ella.
Susana al rescate
Mírela, se ha dormido pero habla cosas raras
¿Cómo sigue la mamita?
Elenita estaba en el cuarto cuando vio que Enriqueta la miraba con sus ojos velados porque le ardía la frente y tenía toda la cara encendida, se asusto y por eso es que llamó a Teresa para que le ayudara.
En el pueblo no se escuchaba nada, pero los sábados en las fincas bananeras los trabajadores se tomaban su día libre y jugaban sin permiso.
Juguemos ya que no esta el inspector
Susana la vecina entro a la casa para ver como estaba Enriqueta, y en eso le trae una botella de vinagre y se la puso en la frente. Se fue tranquilizando, les pidió agua y le dieron las píldoras azules que indico doña Teresa.