Michael, un señor cicatero y hablador, fue elegido maestro de obra para eregir fortificaciones a fin de bloquear la ciudad de Chimbote. Él era pipiolo en esa empresa, no sabía cómo trabajaban sus compañeros, por ende, no sabía si la obra y va a salir bien, el destino de esta era ignoto.
MATERIALES
El día de la construcción fue un día tórrido, lo que impidió que los obreros trabajen en condiciones favorables, ya que, trabajar en un día nublado o con poco sol, no tiene parangón con trabajar en un día soleado.
Finalmente, Michael, observó detenidamente el trabajo de cada uno y supo de que toda la obra iba a terminar muy bien.