José Agustín Arango político istmeño, empezó a trabajar en secreto en la preparación del movimiento separatista en compañía de una red de conspiradores.
He venido a Estados Unidos a pedir apoyo económico para alcanzar el objetivo del movimiento separatista.
Los separatistas en lugar de buscar el gobierno central para solucionar sus diferencias envían un representante a pedir apoyo a EE.UU.
El gobierno central tampoco asume una actitud de dialogo, como de costumbre busca solucionar a través de las armas la situación.
Serán enviados para evitar que se cumpla el objetivo del movimiento separatista.