Hae
  • Hae
  • Omat Kuvataulut

Unknown Story

Luo Kuvakäsikirjoitus
Kopioi tämä kuvakäsikirjoitus
Unknown Story
Storyboard That

Luo oma kuvakäsikirjoitus

Kokeile ilmaiseksi!

Luo oma kuvakäsikirjoitus

Kokeile ilmaiseksi!

Kuvakäsikirjoitus Teksti

  • —Cuando tú brillabas en el cielo, nuestro gran Padre San Francisco volvió a ordenar
  • Así tenía que ser
  • El viejo ángel rejuveneció a esa misma hora; sus alas recuperaron su color negro, su gran fuerza. Nuestro Padre le encomendó vigilar que su voluntad se cumpliera.
  • No, padrecito mío, señor mío. Cuando nuevamente, aunque ya de otro modo, nos vimos juntos, los dos, ante nuestro gran Padre San Francisco, él volvió a mirarnos, también nuevamente, ya a ti ya a mí, largo rato. Con sus ojos que colmaban el cielo, no sé hasta qué honduras nos alcanzó, juntando la noche con el día, el olvido con la memoria. Y luego dijo
  • Ahora ¡lámanse el uno al otro! Despacio, por mucho tiempo
  • se transforma
  • Ángel mayor: cubre a este caballero con la miel que está en la copa de oro; que tus manos sean como plumas cuando pasen sobre el cuerpo del hombre
  • Así mismo tenía que ser¡Continúa! ¿O todo concluye allí?
  • Padre mío, señor mío, corazón mío, Soñé anoche que habíamos muerto los dos juntos; juntos habíamos muerto.
  • Como éramos hombres muertos, señor mío, aparecimos desnudos, los dos juntos; desnudos ante nuestro gran Padre San Francisco.
  • —¿Conmigo? ¿Tú? Cuenta todo, indio
  • No, padrecito mío, señor mío. Cuando nuevamente, aunque ya de otro modo, nos vimos juntos, los dos, ante nuestro gran Padre San Francisco, él volvió a mirarnos, también nuevamente, ya a ti ya a mí, largo rato. Con sus ojos que colmaban el cielo, no sé hasta qué honduras nos alcanzó, juntando la noche con el día, el olvido con la memoria. Y luego dijo:
  • —¿Y entonces?
  • No, padrecito mío, señor mío. Cuando nuevamente, aunque ya de otro modo, nos vimos juntos, los dos, ante nuestro gran Padre San Francisco, él volvió a mirarnos, también nuevamente, ya a ti ya a mí, largo rato. Con sus ojos que colmaban el cielo, no sé hasta qué honduras nos alcanzó, juntando la noche con el día, el olvido con la memoria. Y luego dijo
  • Todo cuanto los ángeles debían hacer con ustedes ya está hecho.
Yli 30 miljoonaa kuvakäsikirjoitusta luotu