El enfermo imaginario
Montāžas Teksta
- Hija me siento muy mal, fui al médico y me dijo que estoy muy enfermo
- ¡Oh no padre! Eso es malo, haré todo lo posible para que te sientas mejor.
- Mmmm... Que raro porque ayer usted estaba bastante bien, señor.
- Arpía insignificante intentas decir que miento? Así me dijo el doctor y tengo que comprar bastantes medicamentos
- Bueno si quiere ser tan testarudo...
- Creo que ahora no es un buen momento para quejarme sobre mi compromiso.
- Argán un hombre serio y crédulo, los doctores lo engañan para que les compre caros medicamentos. Y él al escuchar al doctor, empezó a sentirse "enfermo", aunque no lo estaba. Se lo contó a su hija, Angélica y a su sirvienta Antonia.
- Querida, estoy enfermo. Lamento que me tengas que ver de esa manera.
- Amado mío, que terrible noticia espero que te recuperes pronto.
- Antonia y Argán siempre tenían sus peleas y riñas y está vez era porque Antonia no creía que su amo estaba enfermo.
- Si supiera que en realidad ni me importa lo que le pase. Solo quiero su herencia cuando él muera.
- Te amo Angélica, nada podrá separarnos.
- Y yo a ti Cleonte, espero que mi padre no se enteré de nuestra secreta relación
- ¡Se lo tengo que contar a mi madre!
- Argán le contó la noticia a su segunda esposa, Belinda. Quien al parecer se había preocupado por el supuesto enfermo, pero en realidad no le interesaba en nada.
- Angélica tenía un matrimonio arreglado, estaba comprometida con Tomás. Él era el hijo de un muy buen médico, y fue por eso que Argán decidió casar a su hija con Tomás. Luisa, la hija de Belinda, escuchó la conversación de estos amantes.
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