La estación está pluviosa;y el aire, y ese frescorde las mañanas...
Très-bien.
(¡Y lo sufro yo!)
Así es.
¿Y usted, Monsieur...? ¿Guapetón?
Me alegro mucho.
Sí, señor.
Gracias.
Prudencia por Dios.
Usted va de promené, según lo que viendo estoy. ¡Pero con capa...! ¿Quién usa ya ese ropaje español? Parece que usted viviera en los tiempos de Godoy
Yo me visto como quiero.
¡Qué respuesta! ¡Cuándo no!
Servidor.
Póngase usted un Lord Ragland, que es el traje, donde Rosack compré el mío, Y pintado me salió. Me costó caro, verdad; pero es el que sirve hoy de modelo en todo Lima.¡No es extraño! ¿No es así?
¿Quién lo duda? Sí señor.
Por no escucharlo me voy. Hasta luego, mi señora. Caballero...
Ya te compondré yo el bulto
¡Ah! Si parezco un bretón; pero pronto se me pasa: Tomando un vaso de ponch, o una copa de coñac, como si tal cosa estoy. Pero variando de asunto, ¿Julieta está aquí o salió?
ESCENA III
¿Siempre hechicera?
Mala está la guisa hoy
¡Oh! me pongo yo algunos días, que casi insufrible soy.
Déjeme usted don Alejo, mientras más viejo está peor. Se va poniendo intratable. De nada sirve que yole predique a todas horas para que mude de humor. Nada, imposible. Los hombres más duros son que una hoz y si se les mete el diablo ¿Quién puede con ellos?
¡Qué! ¿Padece usted de esplín?
Por dentro anda esa loca.
Favor que usted le hace.
Todo el mundo hace igual observación.
¡Oh! No.
Nada de eso.Lo que es suyo, eso le doy.Mucho más merece.
Esas le tocan a Dios. A quien parecerse tiene: su mamá es una flor aromática y hermosa...
Gracias.
Usted me avergüenza...
Los partos me han acabado;y este tiempo que es atroz¿qué quiere usted? tanta guerra,tanta peste. Ni sé yocómo tengo todavíacara de gente ni...