En casa de doña Ruperta... Ella y su hija Dorotea intentaban explicarle a Inés lo maravilloso, sofisticado, y encantador que era don Faustino Quintalegre, con quien Dorotea planeabacasarse...
Un joven como Faustino hace en una sola noche lo que otros en un año...
...Faustino te dice eso como se dice en la capital.
Cuando su tía y su prima se fueron, Inés se puso a reflexionar sobre lo que le habían contado.
¡Qué Par de Locas!
Me han dado ganas de conocer al galán , y este plumero me servirá de pretexto.
Porque como yo soy municipal... ¡Señor don Faustino, entre usted!
¡No lo permitiré de ningún modo! ¡Pase usted!
Sírvase usted pasar, señor don Victoriano.
Y es que Ruperta y Dorotea habían salido porque se preparaban para la llegada de Don Victoriano, esposo de Doña Ruperta, que traía a Faustino de visita.
Inés, ve a decir a la Ruperta que una visita la espera aquí.
Voy allá al momento.
Mientras se aleja para llamar a Doña Ruperta, Inés dice para sí...
¡Parece un títere el señor diputado del Gobierno!