jefe Cinco-Lluvia, dame tu aprobación, ante el cielo ante la tierra. Mi voz dice esto: Aquí está mi vigor, mi denuedo, que habías entregado, que habías afirmado a mis labios, en mi cara.
Aquí está mi vigor, aquí está mi denuedo; aquí está mi flecha, aquí está mi escudo, que tú habías entregado, que tú habías afirmado a mis la- bios, a mi cara.