En el país de San Santo, había un presidente muy peculiar que decía ser el mejor presidente del mundo. En está ocasión se le mostrará un breve relato de que es lo que hace en un día.
Un Día en la Vida del Presidente
Protestamos para que el presidente deje su pereza y se ponga a mejorar el país, para algo le pagamos.
Aunque el presidente no fuera muy popular, había muchas personas que lo apoyaban y a sus intrigantes propuestas. Por lo que, cada mañana, el presidente daba conferencias acerca de la situación de la nación.
Para apoyar al crecimiento económico del país, mi gobierno propone imprimir más dinero.
Después después conferencias, el presidente decide visitar a su mejor amigo, el presidente de Nuevo Ecuador, país el cual colinda con San Santo.
Y luego, el senador me dijo que no podía reelegirme porque eso era anticonstitucional. ¿Qué tonterías dice, verdad?
Puras tonterías dicen, mi che. Los senadores me dicen que fue una tontería haber invertido en una refinería. A veces me da risa las mentes tan cerradas que tienen.
El presidente suele disfrutar de las ciudades de San Santo por las tardes. Esto lo hace desde su costoso apartamento.
¿¡Qué son esos ruidos!?
No se preocupe, presidente, nada más es una balacera. Aquí estaremos seguros.
El presidente también usa su tiempo para supervisar y empezar nuevos proyectos que ayudarán con la infraestructura del país.
¿Qué quiere que hagamos con este hermosos bosque, patrón?
Destrúyelo todo. Quiero que construyan un campo de fútbol personal para poder ver los partidos sin necesidad de ver tanto pueblerino.
Así son la mayoría de los días para el presidente de San Santo. Se podría decir al menos lo intenta.
¿Quién será el siguiente periodista de oposición que exilié del país?