Necesito hablar con el medico Abel Mazatl en privado, es urgente, la vida de todos depende de esta entrevista.
Yo caí justo en el sanatorio Nuestra Señora del Carmen, en Azcapotzalco. Elvis y yo fuimos transportados hasta el patio central de ese pequeño centro de salud donde varios médicos y enfermeras se habían atrincherado a investigar el extraño comportamiento del macrovirus.
No, Abel, este escuincle tiene que primero decirnos la verdad
Pero no te le acerques mucho
No te preocupes, conozco bien los protocolos de seguridad
Saque la muestra de peste y se la mostré a Abel, le dije que debía refrigerar los tubos cuanto antes, Abel me hizo caso y condujo al tercer piso del edificio. Allí metió lo tubos en una nevera pequeña.
Apenas termine la vacuna, tiene que crear miles de muestras y empezar a repartirlas por el mundo entero. El futuro del planeta entero depende de usted.
Espero que esto no sea una broma de mal gusto. No estoy para chingaderas en este momento.