En una reciente marcha mañanera soportando 32 grados centígrados sobre las espaldas, deambulábamos La Grande y yo por una abandonada vía heredada del cartel de Medellín.
Porque a su edad no usa anteojos?
Nos encontramos de frente en el camino con un gnomo que venía caminando endirección contraria; era- o es, un auténtico ser de luz que sin mediar palabranos manifestó su interés por aceptar nuestra amistad.
Se nos escapo de las manos "El duendecillo"
Ramón como dijo llamarse, nos hiciera un resumen ejecutivo de su maravillosa existencia.Con orgullo nos contó que era un agricultor de oficio con 87 años y padre de 18 hijos “mal arrendados la mayoría de esos vergajos”.
Feliz resto de Dia!
Cuando le pregunté porque a su edad no usaba anteojos: “Ome Don Juan, le cuento que yo estoy muy bien de las vistas porque no se leer”.
De la misma manera que apareció se nos escapó de las manos (o quizás de las palabras) este hermoso duendecillo.Simplemente aprovechó un desvío que ofrecía la vía para decirnos sin detener su marcha:“hasta luego señores, me complace conocerlos”.
Somos muy afortunados amiga, no a todo el mundo lo acompaña a caminar un fantasma.