Un día normal en la vida de una chica de la edad media...
Papá pero...
Tu! ve rápido a la cocina! Que no ves que tu hermano sale ya a la escuela?
Silencio!
Varios años después...
*Se escuchan gritos de reclamo...
¿Porqué no podré ir a la escuela como mi hermano?... Siento que mi vida es más difícil y soy menos valorada que otros... ¿será suficiente todo lo que hago? 
Tienes razón madre...
Esta lista la comida para mi padre y hermano
Que te he dicho de caminar así? Una señorita debe mantener una postura impecableasí nunca conseguirás marido
Debes esforzarte el doble en tus tareas, en la cocina, en la limpieza, en todo!
(¿Porqué no podremos hacer las actividades de los hombres? yo no puedo estudiar ni mi madre ser comerciante como mi padre)...
Hoy aprenderás las labores agrarias de una mujer, desde el proceso de arar la tierra para el cultivo de cultivo, pasas por el riego y posterior viene la cosecha...
¡Pero papa! Yo también soy tu hija y he estado a tu servicio todos estos años
¿Pero y mi hermana que?
Cálmate, ya estuve negociandote con la familia más adinerada del lugar, serás de la aristocracia y cobrare una buena cantidad por tu mano en matrimonio
Estoy ya muy viejo... y he pensado... lo dejaré todo a ti, mi hijo, único heredero y mi sangre
*Suenan las campanas de la iglesia
¡Que felicidad! Al fin lograré escapar de ese cruel destino de la boda y todo sometimiento, lastima que ni siquiera importa mi opinión dentro de la aldea
Es muy cruel como papá o inclusive otros hombres han llegado a degradarte con todo lo que contribuyes, pero ya no te preocupes, pronto estaremos muy a salvo