Un día un chico necesitaba dinero por lo que comenzó a rebuscar entre sus cosas con alguna esperanza de encontrar algo valioso pero solo encontró una botella de chicha que sus padres prohibieron tocar a menos ocurra una festividad.
Luego de probar su delicioso sabor pensó en vertirlo en una pipa de barro pero para su mala suerte fue asaltado y se quedo solo la botella vacía en la mesa sintiendo culpa le lleno con vinagre para disimular su catástrofe.
Después se fue a a la chichería de don Eduardo para ofrecerle su bebida pero el se empezó a reír diciendo que hay muchas personas que le salen con el mismo cuento y que no aceptaría su chicha, y así ninguna chichería lo acepto.
Repentinamente afuera de la casa habían carros y luces por lo que descubrió que era su familia con la botella en la mesa y muchos invitados esperándolo para comenzar, Su padre alardeo mucho sobre la botella de chicha y después bebieron.
Después del discurso del padre, todos exclamaron lo deliciosa que estaba la botella de chicha, el joven sorprendido dijo que había comprado una pipa de chicha a 5 soles.
A nadie le gusto y se escuchaba quejidos de asco, por el padre lo saco y le dijo que fuera a dar una vuelta por el jardín por haberse dejado engañar de bellaco. Fin.