¿Piensan que salen acaso al encuentro de feroz serpiente, y que van a levantar aquella nación? Los llamarán primero con dulzura, sin derramar sangre, ni destruir a nadie
— Al ordenar Chayanta que se reúnan todavía los más valientes, para obligar a los yuncas a que limpien los caminos y que se vistan de cuero, estoy convencido que con esto ha mostrado un corazón pusilánime, que disfraza su cobardía, no queriendo que se marche a pie antes que las salidas se hallen expeditas .Ya que están muchísimos prontos para cargar las llamas ,partiremos al combate; pues nuestro ejército está listo
¡Oh, nobles!, digo que ya llega el buen tiempo para que todo el ejército salga con dirección a Colla Suyu, pues ya Chayanta está listo para salir con nosotros. Que se preparen y afilen sus flechas.
Aún no daré mis órdenes, para que algunos puedan ser persuadidos; porque podría haber muchos que amen demasiado su sangre.
¡Oh, inca! ¿Cómo se han de sostener esos cobardes?, pues el Cusco y sus montañas se levantarán contra ellos, como también ochenta mil soldados, que los esperan prontos al sonido del tambor y tañido de las bocinas. En cuanto a mí, tengo mi maca naafilada y escogida mi maza de armas.
Tu pensamiento es el mío; que se cumpla en el acto(Se va epicamente)