DE LO QUE LE SUCEDIÓ A UN ANCIANO CARPINTERO CON SU HIJO
Señor conde, os veo pensativo... ¿Hay algo que os preocupe?
Pues si Patronio, mi hijo es desobediente y mentiroso, no se como actuar con él.
Si, os lo ruego Patronio, contadme esa historia
Señor conde, aunque no creo que necesitéis mi consejo, lo que me contáis me recuerda a un viejo carpintero y a su hijo. ¿Queréis que os la cuente?
¿Os apetece que salgamos a dar un paseo mientras os cuento esta historia?
¡Por supuesto! Además, hace buen día.
Un carpintero llamado Geppetto que no tenía hijos, hizo una marioneta y un hada madrina dio vida al muñeco.
Geppetto estaba muy feliz y mandó al muñeco a la escuela porque quería que fuera un niño muy listo.
Pero en lugar de ir al colegio, conoció a unos amigos traviesos y juntos, hacían pequeñas maldades y continuamente contaba mentiras
Al ver esta situación, el hada le envió un hechizo: cada vez que decía una mentira, le crecía la nariz poniéndose colorada
Geppetto estaba muy preocupado por su hijo. Un día Pinocho no volvió a casa y salió a buscarlo
Pinocho acabó reconociendo que no se estaba portando bien, y arrepentido, fue a buscar a su padre. Supo entonces que Geppetto, al buscarle por el mar, había sido tragado por una ballena
EL CONDE LUCANOR TRAS ESCUCHAR LA HISTORIA DEL VIEJO CARPINTERO Y SU HIJO, PENSÓ EN UNA ADECUADA MORALEJA
Pinocho se fue al mar para rescatar a su padre, y los dos consiguieron salvarse. Pinocho volvió a casa y al colegio y se portó bien, por lo que el hada lo convirtió en un niño de carne y hueso.
Señor conde, debéis hacer ver a vuestro hijo que la desobediencia y el engaño conducen y hacen sufrir a los que le rodean.
Gracias por tu sabio consejo querido Patronio.
"El orgullo y la mentira no son buenos compañeros de viaje, ensucian el alma y te visten con un mal traje".