El impulso a la educaciòn en el porfiriato (1876 - 1911)
ya que de ellos dependía el desarrollo del país, en este sentido la política de Porfirio Díaz retomó parte de las iniciativas y le dio impulso a muchas instituciones creadas en el gobierno de Juárez.
Por otro lado, Díaz creo nuevas políticas que trajeron consigo la fundación de la institución educativa más importante del país: la UNAM.
La educación durante el porfiriato rescató gran parte del proyecto educativo juarista. Benito Juárez tenía un gran interés por tener una población preparada
En 1867 se había promulgado la Ley Orgánica de Instrucción pública, con una influencia positivista, en la que quedaba asentada que la educación tenía que ser gratuita y obligatoria, sin contener ninguna doctrina religiosa.
Para 1881 se inicia la apertura de escuelas normales con el objetivo de instruir a los maestros y maestras.
Con esto se buscaba tener profesionistas bajo las influencias educativas del positivismo y así dar una educación básica de corte liberal.
La institución tenía bajo su cargo en todos los territorios del país: la instrucción Primaria, Normal, Preparatoria y Profesional
además de algunas academias y sociedades científicas como el Instituto Patológico Nacional; la propiedad literaria, dramática y artística
En 1905 se creó la Secretaría de Instrucción Pública y Bellas Artes con Justo Sierra como Secretario de la misma.
Las ideas educativas durante el gobierno de Díaz estaban permeadas de un pensamiento de avanzada, pero hay que tomar en cuenta que estas son producto de intelectuales como Gabino Barrera o Justo Sierra
quienes desde el gobierno de Juárez estaban planteando estos proyectos a los que afortunadamente pudieron dar continuidad en el porfiriato.