No puedes saberlo. Ni siquieras lo has probado
¡ No me gusta!
Está bien, pero no comerás postre.
Ni verán la televisión
¡No lo voy a comer!
Ni veremos la televisión
Yo tampoco comeré postre
Por la tarde, de regreso a casa, encontramos una enorme serpiente de mar clavada por el cuello en el marco de la puerta
En Sicilia no hay guillotina.
La voy a matar
Te cortarán la cabeza
Hagan lo que les dé la gana!
La Senõra Forbes nos he dicho que el animal se llamaba murena helena. Tenía este nombre porque fue un animal sagrado para los griegos antiguos.
Estoy has los cojones de esta agua de lombrices
La señora Forbes puso la servilleta sobre la mesa, y los tres nos levantamos para rezar. Luego nos mandó al dormitorio, con la advertencia de que debíamos dormirnos en el mismo tiempo que ella necesitaba para acabar de comer
Aquella misma noche, mientras oíamos desde la cama el trajín incesante de la señora Forbes en la casa dormida, mi hermano soltó de golpe toda la carga del rencor que se le estaba pudriendo en el alma
La Señora Forbes se encerró en su cuarto desde las siete. Entonces caímos en la cuenta de que iban a ser las diez y no habíamos sido despertados por la rutina matinal de la señora Forbes.Preparamos nuestro desayuno poco antes de las once, y luego bajamos a la playa con dos cilindros para cada uno y otros dos de repuesto.